fases del sueño

Fases del sueño, ¿qué son y cómo te afectan?

Todas las noches dormimos, por lo tanto, nos sentimos bastante familiarizados con este proceso fisiológico. Sin embargo, ¿qué sabemos al respecto? Alguna vez hemos escuchado hablar sobre las fases del sueño y sobre cómo nos ayudan a recuperar la energía para emprender un nuevo día.

Nuestro descanso se subdivide en esas conocidas fases del sueño. Que nuestro cuerpo logre acumular energía dependerá de que estos ciclos se completen. Una correcta elección de almohadas o colchones, incluso la elección del espacio para el descanso, marca la diferencia. Si quieres saber más sobre esto, ¡quédate con nosotros!

Los ciclos del sueño

La conversación sobre estas etapas la empezó Nathaniel Kleitman en 1925, con su descubrimiento de la fase REM de sueño, y se perfeccionó en 1937 con varios científicos alemanes que nombraron las 5 fases del sueño.

Vamos a ver cuáles son y cuán importantes son para llevar una vida sana.

Etapa de adormecimiento:

Esta etapa, si bien es muy importante, es bastante corta, pues es apenas una transición hacia el sueño. Suele estar contemplada entre los primeros 10 minutos que estamos en nuestra cama.

Etapa de sueño ligero:

A pesar de que su nombre nos hace pensar que debe ser breve, ocupa la mitad de la actividad nocturna.

Al cuerpo le lleva todo este tiempo ir desconectando nuestras funciones y, contrara lo que podemos suponer, es inusual despertarse durante este proceso. 

Etapa de transición:

Al igual que la primera parte de nuestro ciclo, esta etapa es bastante breve y puede tardar menos de 5 minutos en conducirnos al sueño profundo.

Etapa del sueño Delta:

Aunque ocupa menos de un tercio de nuestro ciclo, es un momento muy significativo para el cuerpo.

Alguna vez dijiste: dormí, pero no descansé nada. Eso se debe a que esta fase no se completó, o fue interrumpida. La caída en nuestro ritmo respiratorio y presión arterial facilitan la regeneración de nuestras estructuras corporales y ordenamiento de la memoria del día, entre otros procesos.

Etapa de sueño paradójico:

Mejor conocida como la fase de sueño REM (rapid eye movement): el lugar donde nacen los sueños.

Esta fase del sueño comparte una actividad cerebral muy parecida a la vigilia, aunque nuestros músculos estén completamente desconectados. En consecuencia, logramos captar información del exterior y mezclarla en nuestra ensoñación.

Conclusión

Para tener un buen descanso también es importante tener en consideración nuestros ritmos circadianos, es decir: los ritmos biológicos de nuestro cuerpo. La razón por la cual dormimos de noche es porque estos ritmos se comunican directamente con la actividad que nos rodea. De modo que oscuridad y silencio son primordiales para conseguir un sueño reparador.

Ya nada puede impedirte descansar como te lo mereces, y en Bedland sabemos que conocer nuestros cuerpos es fundamental para conseguir su óptimo funcionamiento. Si evitas trasnochar y escoges las horas más silenciosas para disfrutar de las fases del sueño, tu mente estará muy agradecida y notarás la diferencia de inmediato. ¡De buena mañana!

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